Un verano en La Toscana, sus pueblos más bonitos
Si piensas que lo has visto todo en atardeceres es que no has pasado un verano en La Toscana, como rezaba la peli. En esta estación las puestas de sol alcanzan un rango de colores que no has visto jamás.
¡Oh, mamma!
Esta zona de Italia es que lo tiene todo: paisajes rurales que parecen decorados, ciudades monumentales y pueblos con encanto hasta decir basta.
Por no hablar de su gastronomía.
Y, ¡¡¡ayyyyyyy sus helados!!!!
Es curiosa la cantidad de heladerías que se han llevado el premio a la mejor del mundo en algún momento de su historia. Desearás tener más apetito para tomarte otro sin reventar.
Oye, si nunca has probado el sabor cremino, no dejes de hacerlo. Ya nos contarás, ya. Fli-pas.
Bueno, a lo que íbamos.
Si tienes pensado hacer un viaje de verano a La Toscana, nuestra recomendación es que vueles a Pisa o Florencia, alquiles un coche y te eches a la carretera.
Es una zona tan deliciosa que los trayectos de pueblito en pueblito valen tanto la pena como sus mega conocidas urbes: Florencia y Pisa.
Peeeero, a menos que te vayas el verano entero o como mínimo un mes, no lo puedes ver todo.
Keep Calm y ve desempolvando las maletas que nosotros te contamos qué ver en La Toscana sí o sí en un viaje estival.
Vamos al lío.
Los pueblos más bonitos para un viaje de verano a La Toscana
A ver, empecemos por decir que La Toscana es un área que está al oeste en la parte central de Italia (donde empieza la caña de la bota en el mapa) y tiene una superficie de unos 23.000 km².
¿Qué queremos decir con esto?
Pues que recorrerla entera en un mismo viaje veraniego está chungo.
Así que toma nota de los must de esta tierra mágica; los pueblos con más carácter no solo de esta zona, sino de toda Italia. De hecho, muchos de ellos son los que debería incluir cualquier cuaderno de viaje por Italia que se precie.
Y ahora sí que sí, vamos con lo mejor de La Toscana.
#1 Florencia
¿No pensarías ir a La Toscana un verano de estos y no pisar Florencia, no?
A esta maravillosa ciudad tienes que ir al menos una vez en la vida. Es de esas cosas tipo plantar un árbol o escribir un libro (de tener hijos mejor no hablamos, ejem) que hay que tachar de la lista antes de estirar la pata.
Florencia tiene tantísimo que ver que deberías dedicarle como mínimo 2 días. Organízate bien con un Cuaderno de Viaje de esta ciudad que, además de ayudarte a planificar, será el mejor recuerdo que te traerás de tu visita a este impresionante lugar del planeta.
Sus calles y plazas tienen un rollazo tremendo. Solo pasear por ellas y comer una bistecca alla fiorentina en un restaurante o una schiacchiata sentado en sus históricas callejuelas, bien valen su tiempo.
Y claro, no te puedes perder lo básico: los colores de El Duomo; cruzar el Ponte Vecchio; darte un atracón de arte en el Museo Uffizi y, por supuestísimo, el imponente David de Miguel Ángel en la Galería de la Academia.
#2 Pisa
Puede que estés pensando que Pisa no debe ser para tanto.
Te equivocas: lo es.
Es de esos sitios que, aunque hayas visto tropecientas veces en postales, películas y documentales, cuando tienes frente a ti la gran plaza con la torre desafiando a la ley de la gravedad, no puedes dejar de hacer fotos.
Además de la torre inclinada y su catedral, Pisa merece mucho la pena por su muralla, el Camposanto y la Piazza dei Cavalieri. Con esto completas un día único.
#3 Siena
Si hay un lugar donde no puedes dejar de ir en un viaje de verano en La Toscana, ese es Siena.
Todo lo que te hayan dicho es cierto. TO-DO.
Sus colores, sus edificios, el hecho de que el tráfico no pueda entrar, absolutamente todo hace que te sientas como en un pueblo medieval.
Musts de Siena: tomar algo en la Piazza del Campo (un simple panini de salami recién hecho te elevará a lo más alto, con permiso de los vegetarianos), visitar la catedral y disfrutar de las vistas desde lo más alto de la Torre del Mangia. Pura maravilla.
#4 Lucca
A un tiro de piedra de Florencia está esta ciudad en la que disfrutarás de lo lindo porque, entre otras de sus bonituras, está que no es tan visitada como otras.
También llamada la ciudad de las 100 torres y las 100 iglesias, Lucca es una señora ciudad medieval.
Cálzate un buen par de zapatillas para patearte sus calles adoquinadas y no perderte ninguno de sus rincones.
Lugares donde poner tu bandera sí o sí en Lucca: la elíptica Piazza dell’Anfiteatro; la Torre Guinigi para unas vistas de postal y la catedral de San Martín, que tiene diez siglos. Ahí es nada.
#5 Montepulciano
En tu viaje estival por la Toscana tienes que ir a Montepulciano como sea. Eso sí, el día que vayas ni se te ocurra ir con nada parecido a unos tacones. Es todo cuestas.
Pero el premio bien paga el esfuerzo. Cuando llegas arriba te está esperando su Piazza Grande y unas vistas increíbles al valle d’Orcia y sus viñedos. La luz aquí cobra otra dimensión. Quédate hasta la caída del sol, por favor.
Lo mejor que puedes hacer en Montepulciano es callejear y alucinar con sus palacetes renacentistas, tomarte uno de sus vinos y rematar con un tiramisú en el Poliziano: brutal.
Para fans de Crepúsculo: os confirmamos que en Montepulciano se rodó Luna Nueva, aunque lo cierto es que está inspirada en Volterra, la siguiente parada de nuestro viaje de verano por La Toscana.
#6 San Gimignano y Volterra
Terminamos nuestro viaje de verano por La Toscana con una jornada redonda.
Estas dos ciudades son dos imperdibles y las puedes hacer en un día. Ventajas de ir en tu propio vehículo.
Empieza por San Gimignano, un claro ejemplo de un “a ver quién la tiene más alta” de la época. Las familias con posibles demostraban su poderío construyendo una torre a cada cual más grande junto a su palacio. Ahora solo quedan 14 pero llegó a haber 72, nada más y nada menos.
Y ya para finiquitar el día, ve a Volterra, pueblo con encanto donde los haya. Es como un viaje en el tiempo en toda regla.
Allí dejaron su huella etruscos y romanos y todavía se conservan lugares como el anfiteatro romano y el Palazzo dei Priori, el que inspiró el “Palazzo Vecchio” de Florencia.
Enumerar todos sus encantos es poco menos que imposible por la cantidad de historia visible que tiene. Así que callejear Volterra es la mejor idea.
Y aquí terminamos nuestra selección de lugares que hay que ver en un viaje de verano en La Toscana con la ilusión de que aproveches cada rincón, te empapes de su historia y vuelvas completamente in love de su luz.
¡Buen viaje!