Sicilia en 7 días llenos de historia

Lo sabemos, escoger qué ver Sicilia en siete días no es ninguna tontería pero si te organizas bien todo saldrá a pedir de boca.

Empecemos por situarla en el mapa.

Seguro que tienes la imagen de la bota de Italia chutando una isla que parece que vaya a salir despedida cual pelota de fútbol…. pues esa es Sicilia.

Un lugar bien especial que por su situación geográfica tiene influencia de tela de civilizaciones y eso se nota en la estructura de sus ciudades y en la cantidad de restos arqueológicos que tienen, ¡qué son muchos!

Ahora que ya estamos situados, avanti con nuestra ruta por Sicilia de una semana, que aquí has mucho que ver.

Qué ver en Sicilia en 7 días

En nuestro afán de proponerte rutas lo más productivas posible, te traemos una selección de los mejores sitios que ver en Sicilia en siete días.

Esos lugares a los que tienes que ir sí o sí para conocer bien la isla sin morir en el intento.

Para sacarle todo el jugo a tu preciado tiempo de vacaciones en esta ocasión te recomendamos que alquiles un coche en el aeropuerto de Catania, que está al sur, o en el de Palermo, al norte, y de ahí salgas hacia tu primer destino.

Sin más preámbulo… ¡Que empiece la función!

Catania

Maltratada por catástrofes naturales por cortesía de su actividad volcánica, Catania es una de las ciudades que ver en Sicilia que son reflejo de su carácter, digamos, con poca inclinación al orden.

Lo mejor de la bulliciosa Catania, con permiso de todas sus maravillas arquitectónicas, son las vistas del volcán Etna desde via Etnea, de verdad que no tienen comparación.

La idea es recorrer via Etnea desde el jardín botánico hasta la Piazza del Duomo; de esta manera habrás recorrido lo más emblemático de la ciudad y disfrutado con la silueta del volcán como te decíamos.

Precisamente en la Plaza de la Catedral (de Santa Ágata), está su punto más popular, la Fontana dell´Elefante, símbolo de la ciudad. Si no le haces una visita al animalito, no has estado en Catania.

Agrigento

Tras nuestro paso por la ciudad que ha resurgido de sus cenizas varias veces, llegamos a Agrigento, un lugar plagado de templos griegos.

Por definirla de manera breve, Agrigento es como un viaje en el tiempo a través de sus restos arqueológicos.

Bien está pasear su centro histórico pero lo realmente interesante se encuentra a las afueras, en el Valle de los Templos. Con ese nombre imaginarás lo que te espera allí: templos griegos a gogó tan bien conservados que le hacen sombra a la mismísima Atenas, con especial mención al Templo de la Concordia.

Este es uno de esos sitios que al atardecer sube puntos; si te puedes quedar hasta que se esconda el sol, mejor que mejor. El contraste de las columnas y restos te va a encantar, especialmente cuando los iluminan.

Pero claro, como el tiempo es limitado, si tienes que escoger vivir un atardecer en un sitio especial de verdad, esta zona también tiene para ti una playa impresionante, la Scala dei Turchi; ver atardecer desde uno de sus escalones blancos como la cal que van a morir al mar también vale mucho la pena. 

Nosotros ahí lo dejamos para que, según tu ruta, puedas ver uno u otro.

Palermo

Si hay un lugar que ver en Sicilia en un viaje de siete días, ese es su capital: la imponente Palermo.

Tanto ella como los palermitanos son un espectáculo, y no digamos su tráfico.

Conducen como si estuvieran compitiendo en un rally y no les tiembla el pulso si se tienen que montar cuatro en una moto.

Así que, lo mejor que puedes hacer es aparcar e ir a todos lados andando, que es una ciudad muy asequible para hacerla a pie.

Así podrás enamorarte de su caos y de su mezcla de culturas sin estar pendiente de que te adelanten por la derecha.

Esta ciudad es un monumento en sí misma, por lo que hay que dedicarle al menos un día completo con su noche, el ambientazo que hay cuando oscurece es digno de ser vivido, comido y bebido.

¿Los imprescindibles de Palermo?

Empecemos por su enorme y ecléctica catedral que mezcla estilos de varios siglos por todas las ampliaciones y remodelaciones que ha sufrido. La visita tiene un plus y es que al estar en la parte alta, tienes muy buenas vistas de toda la ciudad.

Otro hot spot de Palermo es el Palacio de los Normandos y su Capilla Palatina, una verdadera obra maestra con mosaicos dorados de un colorido radiante y bóvedas musulmanas.

Para completar el día, déjate caer por Quattro Canti y acércate al Teatro Massimo, la ópera más grande de Italia… ¿Su escalinata te resulta familiar?

Será porque Coppola grabó ahí algunas secuencias de El Padrino III.

Para terminar la jornada, los mercados de Palermo son un festival de colores, pintorescos vendedores y personal degustando sus productos, te lo pasarás en grande

Cefalú

Para darnos un respiro de Palermo, nos trasladamos a Cefalú, un pueblo pesquero amable a rabiar y con una coqueta playa donde está el banco más romántico del mundo, dicen.

En esta localidad se rodó Cinema Paradiso, la entrañable película de un niño enamorado del cine que conserva todavía ese aire de pueblo que vemos en el film, con sus casas blancas y sus acogedoras calles.

El epicentro de la vida del pueblo está en su catedral normanda; a su alrededor hay muchos restaurantes y heladerías así que aprovecha para zamparte uno de sus típicos cannoli, su dulce más famoso y que no puedes dejar de probar en tu viaje a Sicilia.

Te chupas los dedos y de paso coges fuerzas para lo que te vamos a proponer… subir a La Rocca.

Tranquilidad porque en este viaje no vamos a escalar y el trayecto es tan entretenido que no te va a costar nada. 

La subida, en la que atraviesas las tres murallas de la ciudad, te puede tomar unos 45 minutos y arriba te esperan las mejores vistas del pueblo con el Mar Tirreno a tus pies.

Taormina

De las vistas desde la cima de una roca nos movemos a una ciudad ubicada en lo alto de un monte que también te proporciona panorámicas dignas de foto a raudales.

En Taormina tienes que dejar el coche fuera y un autobús te lleva hasta el centro de la ciudad con más glamour de Sicilia. 

Sí, amigos, aquí hay mucho nivel. 

Para que te hagas una idea, muchos la comparan con Marbella o Saint Tropez.

Esto hace que sea algo más cara que el resto de la isla y que esté abarrotada de gente chic, especialmente en verano.

Y no nos extraña. La verdad es que es preciosa y tiene una de las mejores cosas que ver en Sicilia en siete días: el anfiteatro greco-romano con el Etna al fondo. Brutal.

Ya de por sí el teatro, del S.III a. C., es una maravilla porque está muy bien conservado; la gran diferencia la hace su ubicación, en la parte más alta de la ciudad; desde allí estás como en un balcón con el mar y el Etna de fondo.

Siracusa

Y para terminar nuestro itinerario por los imprescindibles que ver en Sicilia en siete días, nos trasladamos a Siracusa, otra urbe con verdaderas joyas de la arqueología.

Siracusa es bien especial y se divide en dos zonas muy diferenciadas: por un lado, está la isla de Ortigia y luego ya el resto de la ciudad.

Y es que lo más emblemático está en Ortigia, una fortaleza a la que acceder a través de dos puentes en la que no puedes creer la cantidad de tesoros que hay en tan poca superficie.

Para un día en la ciudad que vio nacer a Arquímedes, nuestra recomendación es que dediques la mañana a recorrer sus calles empedradas y te pases por su majestuosa Piazza del Duomo y visites su catedral.

En la plaza hay tanto que visitar entre palacios y templos, que podrías estar aquí todo el día. 

Toma nota de lo que no te puedes perder: por supuesto su catedral por dentro y también por fuera, donde hay restos del Templo de Atenea; Santa Lucia alla Badia por su Caravaggio El Entierro de Santa Lucía y el Hipogeo, lugar muy querido por los siracusanos porque durante la Segunda Guerra Mundial cobijó la imagen de Santa Lucía.

Y por la tarde, el Parque Arqueológico de Neápolis, una zona en la que te esperan monumentos griegos y romanos en cantidad y calidad.

Aquí ponemos fin a este viaje por los lugares que ver en Sicilia en siete días. Acuérdate de dejar un hueco entre destino y destino para plasmar tus hazañas y pensamientos viajeros en tu cuaderno de viaje.