Lo mejor que ver en la Costa Azul: Oh là là, qué nivel
Si andas por aquí es que estás dándole vueltas a qué ver en la Costa Azul, que es la porción con más charme de Francia.
Si vas a la Costa Azul, también conocida como Riviera Francesa, sacúdete de encima el día a día porque allí todo tiene una clase tremenda y al rato te ves como Grace Kelly en un descapotable.
Nos referimos a esas imágenes de la Kelly al volante en Atrapa un Ladrón que seguro tienes grabadas en la retina aunque no hayas visto la película (si no la has visto, ya estás tardando).
Melena y pañuelo sedoso al viento serpenteando por una carretera bajo un cielo tan radiante como ella, entre pinos y con aguas azules de mil tonos a sus pies.
Ciudades estilosas hasta decir basta, pueblecitos con encanto, calas y playas de todos los tipos… en la Côte d’Azur hay mucha tela que cortar. Por eso es esencial que te hagas con un cuaderno de viaje: así en el destino solo tienes que preocuparte de tener batería en el móvil para instagramear absolutamente todo.
Para facilitarte la labor te traemos una lista de lugares que son lo mejorcito que ver en la Costa Azul.
Vamos al lío.
Qué ver en la Costa Azul: los 5 lugares que no te deberías perder
Cuando vas a la Costa Azul comprendes verdaderamente el significado de lo que es la dolce vita; no es de extrañar que sea uno de los destinos favoritos de gente de dinero (nótese que no decimos gente CON dinero, sino DE dinero, lo que viene siendo ricachones de los gordos).
Inspiración de pintores y escritores vanguardistas como Chagall o Cocteau, lo que está claro es que la Riviera Francesa es un punto privilegiado del planeta.
¿Empezamos la ruta?
#1 Saint-Tropez
Y hablando de privilegiados, Saint-Tropez es un sitio que ver en la Costa Azul máxima expresión de ciudad adorada por gentes acomodadas para su veraneo.
Este antiguo pueblo pesquero se ha convertido en un lugar donde el glamour y la ostentación se ven a raudales, los yates abundan y el champagne es la bebida oficiosa.
A pesar de su popularidad ha conservado el encanto provenzal y un paseo por sus calles de fachadas en color pastel es una delicia; si puedes, sube hasta la Ciudadela para disfrutar de esas vistas tan típicas de la costa mediterránea con el pueblecito a tus pies y el mar al fondo.
Y si tu planificación te lo permite, quédate a ver el atardecer desde su pintoresco puerto; si no tenías pensado estar allí a esas horas, no pasa nada, también vale mucho la pena de día.
#2 Cannes
Si eres amante del cine, Cannes es un lugar que ver en la Costa Azul sí o sí.
Además del famosísimo festival de cine que reúne cada año la flor y nata del cine mundial, la ciudad es divina y de nuevo la elegancia y el lujo se palpan en el ambiente.
Tienes que recorrer La Croissette. Por su paseo marítimo de más de tres kilómetros te sientes como una verdadera estrella rodeada de casinos, hoteles míticos y tiendas de lujo a un lado y playas de arena fina al otro… ¡Un locurón!
Pero no creas que aquí solo tienen cabida celebrities, porque cualquiera lo puede pasar en grande en lugares que conservan su esencia en los Allées de la Liberté donde tienes mercados, genuinos quioscos y pistas de petanca como en cualquier pueblecito.
#3 Niza
Que sí, que sí, somos conscientes de que Niza no es ninguna sorpresa en un listado de lugares que ver en la Costa Azul.
Pero es que si no has estado nunca tienes que ir aunque tengas que compartirla con otros viajeros que hay por allí en cualquier época del año.
¿Qué se puede esperar de una ciudad cuyo himno (no oficial) se llama Nissa La Bella?
Pues eso, que todo el mundo quiera ir porque es preciosa y elegante y caminar por ella es un gustazo.
La imagen de marca de Niza en el mundo entero es el Paseo de los Ingleses y sus siete kilómetros de playas; por allí hay actividad a cualquier hora y es de los lugares favoritos de la gente para correr o ir en bici.
Si eres runner, una carrera por la Promenade des Anglais, bañado por la Bahía de los Ángeles, debería estar en tu lista de cosas que hacer en la Costa Azul.
Una vez has recorrido su bulevar más famoso, lánzate a las callejuelas del Viejo Niza llenas de iglesias barrocas, mercados y plazoletas donde tomar un vino y alucinar con la mezcla contemporánea y de Belle Époque que tiene.
#4 Grasse
A un tiro de piedra de Niza tienes un destino bien diferente y de los más emocionantes que ver en la Costa Azul porque es un festival para los sentidos.
Grasse es la capital mundial del perfume, no en vano está en una colina dominando un valle repleto de campos de lavanda haciendo un manto de color lila digno de ver y de plantaciones de otras flores como el mirto, jazmín, rosa o flor de azahar salvaje.
Como no podía ser de otra manera, esto se ve al moverte por la ciudad; decenas de perfumerías y callejuelas medievales en las que no es difícil imaginar al protagonista del libro El Perfume que, cómo no, sucedía entre sus muros.
También es curioso visitar su Museo Internacional de la Perfumería, especialmente el invernadero donde puedes oler las esencias con las que se elaboran los perfumes.
#5 Saint-Paul-de-Vence
No se concibe una ruta por los mejores sitios que ver en la Costa Azul sin hacer parada en Saint-Paul-de-Vence.
Esta localidad se puede considerar la musa de muuuchos artistas del S.XIX y el XX además de Chagall; seguro que te suenan Matisse, Modigliani, Léger, Renoir o Miró. Todos ellos se atrincheraron allí largas temporadas a crear.
Eso queda patente en este pueblito amurallado que está en lo alto de una colina y muy bien conservado porque en él conviven casas con galerías de arte y las subastas son frecuentes.
Precisamente eso es lo más singular de Saint-Paul-de-Vence: la cantidad de espacios artísticos en un pueblo de su tamaño y un festival artístico de vanguardia entre muros y calles de piedra que son a la vez un viaje al pasado y al futuro; solo sentarse a observar es pura fantasía.
Y ya que estamos en clave artística, no te pierdas la Fundación Maeght donde puedes ver exposiciones de arte contemporáneo en un palacete que es un monumento en sí mismo.
Si visitar museos no es lo tuyo o simplemente no te apetece, un paseo por sus callejuelas medievales dentro de la muralla es más que suficiente. Por algún motivo alojan a lo más selecto de los actores y actrices que van al festival de Cannes y quieren huir de la ciudad.
Tras este empacho de cosas que ver en la costa azul repletas de estilo y belleza es muy probable que a la vuelta te sientas un pelín miserable.
Tranquilidad, porque la depresión postvacacional se cura plasmándolo todo en tu libro Mis aventuras por el mundo, al que podrás volver siempre que quieras 😉